19 de Agosto de 2025. 5:02 pm.
Hoy se cumplen 80 años del primer partido en la historia del Club de Futbol Monterrey. Este también fue el primer partido profesional de futbol disputado en Nuevo León.
En 1943, la Liga Mayor, originada en la capital del país décadas atrás, decidió declararse profesional. A la par de esta declaración, su rango de acción iba expandiéndose e incorporando a equipos de otras regiones del país, principalmente del Bajío, así como del occidente y del oriente del país.
Para la temporada 1945-1946, tres equipos se sumaron a los 13 que ya conformaban la Liga Mayor: San Sebastián, Tampico y Monterrey. El proceso para que nuestro equipo fue largo y complejo. Las gestiones iniciaron en 1944 y el principal requisito fue que los dirigentes de la Asociación de Futbol de Nuevo León (organismo del que salieron los futuros dirigentes del Club de Futbol Monterrey) fueran capaces de organizar el campeonato nacional amateur de futbol, el cual llevaron a cabo en marzo de 1945.
Además, la selección de Nuevo León se coronó por primera vez campeona en ese certamen. De esa selección saldría la base de jugadores para el equipo que participaría en la Liga Mayor.
Después de formalizarse la fundación del equipo el 28 de junio, continuaron las gestiones para participar en la Liga Mayor. Finalmente, el 7 de agosto, la directiva regiomontana recibió la confirmación de que el Monterrey fue aceptado para participar en la liga. El calendario de juegos marcó que el Monterrey abriría la temporada en casa frente a otro equipo debutante: el San Sebastián.
La expectativa por ver futbol de primer nivel en la ciudad creció. Los personajes que por años habían estado promocionando el futbol en la ciudad confiaban en que el traer futbol de primer nivel a la ciudad ayudaría a despertar más el interés por este deporte, ya que el beisbol era más popular.
Precisamente en un torno completamente beisbolero nació nuestro equipo. Para debutar tuvo que hacerlo sobre el campo del Parque Cuauhtémoc, sede del equipo de beisbol que hoy lleva el nombre de los Sultanes de Monterrey.
La cancha mostraba la loma de pitcheo y en el fondo se distinguía la pizarra utilizada para el beisbol en la que se indicaban entradas, carreras, outs y strikes.
El domingo 19 de agosto de 1945 compartieron cancha el Club de Futbol Monterrey y el Club de Beisbol Monterrey. Los “Fantasmas Grises” recibirían a las 16 horas al equipo de La Junta de Nuevo Laredo (hoy Tecolotes de los Dos Laredos).
El partido de futbol entre Monterrey y San Sebastián se programó para las 10:30 de la mañana. A las 8:30 horas, muy temprano, se jugó el partido preliminar entre las Reservas del Monterrey y el Huleras de Parras.
A las 10:30 de la mañana inició la ceremonia de inauguración. El Lic. Armando Arteaga Santoyo, en representación del gobernador de Nuevo León, Arturo B. De la Garza, dio la patada inicial. Se izó la bandera de nuestro país y se tocó el himno nacional mexicano.
Quince minutos más tarde dieron inicio las acciones del primer partido en la historia del Club de Futbol Monterrey ante una asistencia de alrededor de 500 aficionados.
El director técnico Manuel Galán envió la siguiente alineación: Raymundo Palomino; Antenor Medina (capitán), Enrique Lizano, Miguel Quezada y Santiago Bonilla; Gonzalo Buenabad, Guillermo Cuadros Vidal, Leonardo Zamudio; Octavio “Gene” Rivera, José “Che” Gómez y Arnulfo Avilán.
Las crónicas de los distintos diarios regiomontanos como El Norte, El Porvenir y El Tiempo coinciden en que fue un partido de mucha entrega y gran lucha en medio campo, bajo un sol portentoso que rápido agotó al cuadro visitante, menos acostumbrado a las altas temperaturas que se viven en el norte del país.
En aquel entonces no existían los cambios en el futbol. Por ello, para el complemento siguieron los mismos 22 jugadores. En el minuto 69, el hispano-argentino José “Che” Gómez, abrió el marcador.
Leonardo “Chanclas” Zamudio, quien había sido el elemento albiazul más insistente en ese partido, volvió a colarse al área rival y disparó potente. Cristóbal Jiménez rechazó, pero el Che Gómez se avivó y, de pierna izquierda, mandó el balón al fondo de las redes. Ese fue el primer gol en la historia de nuestro Club.
El Monterrey intentó ampliar el marcador, pero ya no le fue posible. Finalmente, el árbitro Rafael Valenzuela pitó el final del partido. Así se escribió la historia. El Club de Futbol Monterrey disputó y ganó su primer partido oficial en su historia hace 80 años y hoy sigue buscando éxitos.
Alberto Barrera-Enderle